Wednesday, March 14, 2007

Même por petición de Mai: mis manías

Esto está muy muerto... A ver si con este post os animo a postear a todas de una vez.
A pesar de que tengo miles de manías intentaré recoger las menos frecuentes a mi juicio:

1- Soy incapaz de dejar un libro a medias. Si empiezo a leer un libro, tengo que llegar hasta el final, aunque no me enganche, aunque sea un bodrio…

2- Los viernes no se estudia. Desde que tengo uso de razón, los viernes por la tarde no puedo estudiar. Es como algo “sagrado”.

3- Tengo una serie de rituales (repetición de una serie de chorradas) en cada época de exámenes. La que más me mata es la de vestir exactamente igual que en los exámenes de junio en los exámenes de septiembre, en cada examen que apruebo (mi subconsciente crea una especie de paralelismo entre aprobado y aprobado. Es una cosa acojonante).

4- Cuando se abre una botella de vodka, he de abrirla yo. Antes de las 22:00 pm no se bebe.

5- Cuando voy por la calle andando mi acompañante ha de ir a mi izquierda. En caso contrario, le cambio de sitio o me cambio yo.

6- Me muerdo las uñas compulsivamente y no puedo evitarlo. He intentado de todo, pero no consigo dejarlo. ¡Pero no me rendiré! Algún día pienso conseguirlo…

Bueno, no sé a quién lo tocaba postear. Le paso la pelota a mis compañeras charcotianas. Sé que podéis conseguirlo! Sois capaces de escribir cuatro líneas... y lo sabéis!

Besitos ;)

Saturday, March 03, 2007

Preguntando se va a Roma...

Acabo de volver hace dos días y quiero volver a Roma :(

Voy a contaros un poco cómo ha sido mi viaje a Italia, siempre respetando el anonimato y la intimidad de mis colegas juristas que desde que han sabido del éxito del blog prefieren permanecer en la sombra. (Si tengo que nombrar a alguien utilizaré las iniciales, como en las sentencias).

El día 18 de febrero cogí el Altaria Irún-Madrid y llegué allí hacia las 22:15 . Habíamos quedado todas el la Plaza Castilla y el plan era pasar la noche en la Terminal 4 de Barajas durmiendo, ya que el avión salía a primera hora de la mañana. Volamos con “Vueling” y tras un par de horas de vuelo llegamos a Roma. Luego cogimos un tren hasta Termini y allí esperamos a la quinta (llamémosle H. xD).


Primer día en Roma. Lo primero era lo primero, fuimos a nuestro albergue que estaba junto a la estación de Termini y dejamos nuestras cosas. El albergue era bastante peculiar… era un piso de varias habitaciones y tan… multicultural. Nuestra habitación estaba compuesta por 5 o 6 literas y compartimos habitación con 4 franceses y un inglés (bastante mayorcito para un albergue juvenil, por cierto). Habitación mixta, genial. Tras dejar las maletas (bien cerradas, cómo no) fuimos a comer algo a una Trattoria de la zona. Lo cierto es que estábamos cansadísimas, necesitábamos una buena siesta, pero nos armamos de valor y nos arrastramos hasta el Coliseo y las ruinas. Aquello era impresionante, no podía creerme que estuviera frente al Coliseo, donde dos mil años antes las fieras devoraban a algunas personas (y dicho sea de paso, Russell Crowe luchaba contra otros gladiadores). Fuimos a una cafetería mega-fashion frente al Coliseo porque M.M. se encontraba mal y nos clavaron 5 € por cada café (ya sabéis donde no hay que ir). Tras reponernos y paladear el delicioso capuccino de 5 € con detenimiento, fuimos a ver las ruinas, pero estaba cerrado, así que regresamos al centro y visitamos los típicos sitios: la Fontana di Trevi, El Panteón, la Piazza Navona (con el helado correspondiente), la Piazza della Republica, varias Basílicas, etc. Mejor no hablar del “edificio-pastel” (Monumento a Vittorio Emanuele II). Cenamos en un restaurante en una callecita cerca del Panteón. Regresamos prontito a “casa” que estaba M.M. allí sola…

El ColiseoEstatua de Julio César
Monumento a Vittorio Emanuele II (también conociedo como la "tarta nupcial")
El Panteón

Edurne y yo en la piazza Navona

La Fontana di Trevi (de noche)Lanzando la moneda en la Fontana

Segundo día en Roma. Ya que vamos a Roma hay que visitar el Vaticano, así comienza el día. Cogemos el Metro desde Termini hasta Ottaviano, y tras dos horas de cola llegamos al Museo Vaticano. Recorrimos los pasillos del Museo y llegamos hasta la Capilla Sistina. Hubiéramos necesitado un día entero para ver bien aquello, era enorme! Qué decepción no vi al Papa! xDD Fuimos a comer cerca de la plaza San Pedro y nos timaron de mala manera. Además el servicio horrible (me preguntaron a ver si era Americana, si es que…). Después de amortizar bien los 12-14 € que nos cobraron a cada una por un plato de pasta (“de aquí no nos mueven hasta que hagamos la digestión”- esa era la idea) fuimos a la plaza San Pedro y entramos en la Basílica. No hay palabras para describir aquello. Hay que ir, en serio.

Por la tarde volvimos al centro y visitamos de nuevo los lugares que M.M. no había podido ver la tarde anterior. Añadiendo la Piazza del Popolo y la plaza de España y haciendo un recorrido diferente. Terminamos el día cenando en un restaurante del centro llamado “Life” que os lo recomiendo. Cenamos genial, barato y el servicio muy bien ;)

En Roma hay muchas tiendas de ropa...


Edurne, Helga y yo en la Estatua del Elefante


Estatua del Vaticano... (no tengo ni idea de cómo se llama, pero es famosa, verdad? xD)

Por los pasillos del Museo Vaticano

El patio interior del Vaticano (el parking del Vaticano xD)


Por los pasillos...


La Basílica San Pedro
La plaza San Pedro


Plaza San Pedro
Roma, arte en cada rincón...
Castillo de San't Angelo
Desde el puente de San't Angelo

Plaza de España

Un león :( Piazza del Popolo


Y... de compras! Cómo no!

Tercer día en Roma. Hoy volvemos a las ruinas ya que el primer día, cuando fuimos estaban cerradas. Allí pasamos la mañana recorriendo lo que un día fue el antiguo pueblo romano. Allí vivian Ticio y Cayo, Sempronio, Agripa y el esclavo Estico. Pudimos ver donde se reunían los Senadoconsultos y todas esas cosas que pudimos estudiar una y otra vez en Derecho Romano y nos hacía bostezar. Allí estábamos viendo desde cerca las calles donde se realizaban compraventas de esclavos, entre otras cosas. Los romanos, inventores de los acueductos, las cloacas, las calzadas, el orden público y el vino! (Sí, síiiii, el vino!) Me impresionó bastante, la verdad. El Coliseo y las ruinas fueron lo que mas me impactó. (Queda claro el Coliseo, verdad? xD).

Después de ver la prisión donde encerraron a San Pedro fuimos al Trastevere y comimos allí. El Trastevere es el barrio bohemio de Roma. Las calles son como en las típicas pelis italianas: casas bajas con terracitas y calles estrechas con calzadas de piedras y yedras en las fachadas. Allí se encuentra la Basílica de Santa María del Trastevere, que también tuvimos el honor de visitar. Roma, arte por todas las esquinas, en cada rincón de la ciudad.

En nuestra última noche volvimos al centro, cenamos en “Life” de nuevo, dimos nuestros últimos paseos por la ciudad del arte y a las 23:30 estábamos en Termini rumbo a Génova.


Ruinas de la antigua Roma:

Cloaca romana! (¿Quién inventó el alcantarillado?)

Aquí me tenéis haciendo el tonto sobre una columna...


Aquí se reunía el Senado!!!


Foro romanoY esto es una manifa en el centro de Italia!

El tren que tomamos en Termini para ir a Génova era un tren nocturno (de 00:00 a 6:00). No podéis imaginaros la gente que iba… Algunas incluso pasaron miedo pensando que nos iban a atracar (ahora que ya ha pasado me llamaréis exagerada!) De repente, anunciaron que el tren procedía de Nápoles, la cara de mis colegas juristas era impagable… Dormimos como pudimos y llegámos a Génova. Estábamos tan cansadas que lo único que hicimos fue arrastrarnos a casa de H. y seguir durmiendo hasta la tarde. Me fijé al salir de la estación que había una estatua de Cristóbal Colón. Sólo me quedé con ese detalle.

Los días en Génova fueron más relajados. El primer día lo único que hicimos fue dormir, ir a hacer las compras y volver a casa. También dimos un pequeño paseo por los alrededores. A la noche nos invitaron a la fiesta de cumpleaños del vecino (Apu) y nos dejamos caer un rato por aquella pequeña ONU en la que básicamente nos dieron de cenar y donde apenas pudimos comunicarnos debido a nuestro desconocimiento de italiano.


El segundo día que estuvimos en Génova fue el más intenso. Nos levantamos pronto para poder ver la ciudad a fondo. Primero cogimos un ascensor para subir a un mirador para ver la ciudad desde allí. Después bajamos andando hasta la ciudad y recorrimos las calles hasta la piazza Ferrari y visitamos un poco los alrededores. Vimos la casa de Cristóbal Colón, que por lo visto es de Génova xD. Luego continuamos hasta la plaza de la Victoria, atravesamos el enorme arco y subimos las infinitas escaleras hasta el otro mirador. Allí permanecimos sin aliento unos minutos (demasiadas escaleras) y luego regresamos al centro. El autobús nos acerco hasta el comedor donde H. come habitualmente y allí comimos por 2,50€!. Después de comer fuimos a tomar el capuchino a una cafetería con terracita, haciendo planes y demás. Esa noche tocaba la farra Erasmus… A la tarde dimos otra vuelta por Génova y fuimos a comprar comida y alcohol. Esa noche nos habían invitado a una fiesta en casa de un amigo de H. y luego a beber y de fiesta… En fin, hay cientos de fotos y unos cuantos vídeos, pero eso sí que censuraremos. Sólo diré una cosa: mucho vodka y cerveza. Terminamos la noche en un garito llamado “Milk” que era un verdadero antro. El “Milk” me recordó un poco a la sala Tunk de Irún antes de ser reformada (por si alguien lo recuerda). Empezamos bastante animadas y fuimos poco a poco apalancándonos en una tarima que había allí. Finalmente nos fuimos a casa en taxi, que por cierto, nos timaron de nuevo.

El tercer y último día en Génova fue bastante relajado. Dormimos hasta las tantas, comimos tardísimo en casa y luego fuimos a dar una vuelta. Esa noche íbamos a preparar una cena en plan despedida con una receta de la cosecha de M.M. que quería ponerla en práctica y compartir sus conocimientos gastronómicos con nosotras ;) A una compañera de piso de H. se le caía la baba con la receta…

Después de dar una vuelta por la ciudad volvimos pronto a casa para hacer la cena. Cenamos en casa de las vecinas todos juntos y después de cenar estuvimos viendo más fotos de la noche anterior y algunos vídeos. Allí estuvimos hasta tarde a pesar de que al día siguiente nos tocaba madrugar para ir a Milán.

Último día del viaje. Día de Viajes. Por la mañana llegamos a Milán y tras dejar las maletas en la estación, cogimos el metro y nos acercamos al centro para visitar un poco la ciudad de la moda. Apenas vimos nada, estábamos pasadísimas, muertas y ya ni sentíamos ni padecíamos nada. Visitamos la Catedral (incluso nos quedamos a ver un poco de misa) y luego atravesamos la Galería. Allí había mucho arte y cuatro tiendas: una de Prada, Massimo Tutti, Gucci, una de ropa para Mercedes y… McDonnald’s! (habría alguna tienda más, pero no me acuerdo). Tras la Galería había una plaza con una estatua de Da Vinci, el Banco Central y el Teatro. Eso fue todo. Fuimos directas al aeropuerto donde pasamos las últimas horas en Italia y donde pasamos la tarde. Dos horas para facturar, dos horas para esperar la hora de embarcar, otra media hora por lo menos en la cola para embarcar, etc. etc.

Por fin llegamos a Barajas! Estábamos en España de nuevo! (Quién me ha echado de menos???) Estuvimos bajo tierra de una línea de metro a otra y luego a casa a cenar y a dormir.

Al día siguiente madrugué y pasé la mañana con “la prima” (Izar). Quedamos en Moncloa y luego fuimos a Atocha a por mi billete de tren. Luego estuvimos cerca de Atocha tomando algo y luego comiendo. A las 14:00 salía mi tren con destino a Irún. Me pasé toda la tarde en el tren leyendo y con el mp4 y a las 19:30 llegué a Irún. Nada más abrir la puerta del tren, allí apareció mi niño que venía a recogerme a la estación…
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